Ha veces queremos ser tan buenos, tan benevolentes, protectores, y hasta padres de nuestra pareja que aceptamos vivir sin ilusiones, cerrando la boca, tragando en seco algunos tratos, por tal de conservar y mantener a nuestro lado una persona que no amamos, aunque la podemos querer, sin que tenga en la mayoría de los casos muchas cosas afines con nosotros.
Hay casos de casos, y este es uno de ellos. Escuchamos decir:
-pero le tengo lástima-
-es tan buena persona-
-no tiene malos sentimientos-
Sucede que conozco muchas personas que cuando salen de los trabajos no van directo a sus casas, se quedan divagando en sus carros por las calles de la ciudad, o se van a las tiendas, -a mirar, supuestamente- al final salen con sus paquetes porque esto se llega a convertir en el hobby de llenar ese rato para no enfrentar la convivencia en casa con la pareja que espera allí pacientemente o intranquilamente.
Estas situaciones son muy frecuentes, no tener ganas de llegar a la casa y en ella sentirte mal, no estar a gusto en tu propio hogar, !que triste!, por Dios, ¿a donde vamos a parar con nuestra vida?
Para esto está la palabra, si no eres feliz, ve limpiando tu camino, la vía, el entorno, tendrás que quedarte un tiempo sólo o sóla, no temas, no pasa nada, luego restableces el sendero.
Pero de que vale quedarte detenida o detenido en una mala relación. No es justo para ambos en una pareja y repito las cosas tienen solución, es por medio de la palabra, la comunicación .
Las acciones, el silencio y la continuación sólo te conllevan a vivir infeliz.
-¿Acaso para eso es la vida?
Hay que afrontar las realidades, a veces son duras, pensamos que somos malos si tomamos decisiones. No te castigues. No te culpes. Mal es estar en desacuerdo, en insatisfacción con uno mismo, recordemos que la vida es limitada no eterna, hay que vivir cada instante lo mejor posible, en alegría, con amor, reflexiona hoy y comienza a limpiar el camino de tu bienestar.
Hay casos de casos, y este es uno de ellos. Escuchamos decir:
-pero le tengo lástima-
-es tan buena persona-
-no tiene malos sentimientos-
Sucede que conozco muchas personas que cuando salen de los trabajos no van directo a sus casas, se quedan divagando en sus carros por las calles de la ciudad, o se van a las tiendas, -a mirar, supuestamente- al final salen con sus paquetes porque esto se llega a convertir en el hobby de llenar ese rato para no enfrentar la convivencia en casa con la pareja que espera allí pacientemente o intranquilamente.
Estas situaciones son muy frecuentes, no tener ganas de llegar a la casa y en ella sentirte mal, no estar a gusto en tu propio hogar, !que triste!, por Dios, ¿a donde vamos a parar con nuestra vida?
Para esto está la palabra, si no eres feliz, ve limpiando tu camino, la vía, el entorno, tendrás que quedarte un tiempo sólo o sóla, no temas, no pasa nada, luego restableces el sendero.
Pero de que vale quedarte detenida o detenido en una mala relación. No es justo para ambos en una pareja y repito las cosas tienen solución, es por medio de la palabra, la comunicación .
Las acciones, el silencio y la continuación sólo te conllevan a vivir infeliz.
-¿Acaso para eso es la vida?
Hay que afrontar las realidades, a veces son duras, pensamos que somos malos si tomamos decisiones. No te castigues. No te culpes. Mal es estar en desacuerdo, en insatisfacción con uno mismo, recordemos que la vida es limitada no eterna, hay que vivir cada instante lo mejor posible, en alegría, con amor, reflexiona hoy y comienza a limpiar el camino de tu bienestar.
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