DEDICATORIA:

Al Señor, Creador del Universo.

A todas las mujeres y hombres del Planeta Tierra que están dispuestos a amarse y a amar.

A mis amigas y amigos que siempre han estado como ángeles guardianes en mi vida, para ellos, sus hijos y nietos, porque los libros pasan de generación en generación.

A los que aun prefieren vivir pasiones tormentosas y desean parar de sentir el dolor del alma, a todos los que se involucran en un triángulo amoroso.

Con mucho amor, estos mis consejos, no por sabía los escribo, sino por haberme enamorado y tener la oportunidad que nos da el SEÑOR de rectificar y aprender una lección.

V.A.